Thursday, February 17, 2011

SEMAFORO EN ROJO













No tengo nada,
no tengo a nadie
y me basta,
como extraño las llamadas de madrugada,
como extraño yo llamar con resaca
y un par de mujeres salvándome,
tomando un bus,
un taxi,
viajando 2 horas
o 4,
hasta llegar a mi lado;
salvándome de la soledad,
soportando mi aliento apestoso
mezcla de alcohol y añoranzas,
tirando su dinero en cerveza y hoteles baratos;
ya no hay mujeres así,
las hay santas,
también quien no me ha dejado a la deriva,
pero,
para salvarme
y mandar a la mierda todo,
tiene que ser mujeres "enloquecidas",
de senos grandes,
solitarias,
jodidas,
con pasados quebrados,
tiene que ser mujeres “maliciosas”,
sin futuro,
que solo esperen,
a que maneje en sentido contrario
y nuestras vidas
se destrocen,
en un semáforo en rojo.