Thursday, February 25, 2010

DAY OF DEFEAT

No se si he aprendido a “suprimir el dolor”, o simplemente no me queda ya más; pareciera que antes lo guardaba en paquetitos (sic, Astroman X) y no importaba que tanto valiera la pena, yo me lo inyectaba y patéticamente daba tumbos por todos lados. Me resultaba completamente natural usar “el dolor” hasta para una simple negativa; lo reconozco, muchas veces lo combinaba con antipatía /soberbia, lo cual resultaba en un chantaje emocional. De cierta forma, es difícil darse cuenta que ya mecánicamente usaba esa fórmula, sin embargo, nunca me di un tiro, tampoco amanecí autoinmolado. Y eso por qué no soy capaz ni de soportar un dolor de muelas, menos, y aunque fuese por un instante, toleraría la sensación de un filoso cuchillo en mi estómago o la angustia de la asfixia tras una cuerda en mi cuello.

Lo único que logré con mi “mecanismo no de defensa, sino de ataque”, fue ser hiriente; con vergüenza recuerdo los malos tiempos que le hice pasar a Grissa, ella totalmente se dedicó a mi y yo solo acumulaba y nunca di una mierda. Tampoco estoy orgulloso de haber fastidiado la vida de Idalia, quizá estábamos predestinados al fracaso, pero debí haber tenido tolerancia y pudo haber sido menos doloroso el día que ya no regresó a casa. ¡Mierda! que rabietas le hacía a Karina por celos, además, seguramente infundados; hasta la fecha sigue manteniendo una inocencia atroz, cosa que yo no tengo, ni en términos de como llevo mi vida me convendría. La paciencia tampoco es una de mis virtudes, la prueba fue mi egoísmo para con Ayesha, no le di respiro… casi lo logré; si hubiese sido menos imprudente, menos desesperado, menos
Juan Beat…

Todas las demás mujeres con las que he pesado tiempo no pueden quejarse, hemos combatido justamente, sin engaños o manipulación de mi parte; ya ni si quiera me “desilusiono” ante un “NO frontal”; bien en un poema Sabines mencionaba:
“Tratar de convencer a otra persona es indecoroso, es atentar contra su libertad de pensar o de creer o de hacer lo que le de la gana.” Hace años pasé mucho tiempo tratando de convencer y aquí está el resultado: un hombre rodeado de gatos, el cuál, su mayor felicidad es simplemente que nadie le pida que deje de beber. Lo demás, lo voy guardando en un usb de 512 megas y al saturarse, borro todo y vuelvo a llenarlo.

Así funciono ahora, yo un egoísta nato, me di cuenta que la gente puede hacer lo que se le de la gana, incluso, no querer estar conmigo, engañarme, tirarme a la basura, al final cada quien acabará como resultado de las propias decisiones. No me veo sin una cerveza diaria, pero si en un quirófano, eso ya no será parte de mi mecanismo de dolor/chantaje, solo será porque así se me ha dado la gana, solo será un día más de derrota.

Friday, February 19, 2010

FULHAM ROAD

Aislado en un bar de Fulham Road, vuelvo a leer aquel “libro improvisado” que le di a Ayesha, se que nunca podré reponerme, por eso me subí a un avión casi sin ganas, solo con la esperanza de re-encontrarme de nuevo con historias, solo con ganas de una pinta de cerveza más; a nadie le molesto aquí… igual me ven raro, pero después de tres o cuatro cervezas no les interesa quién o qué esté en la barra bebiendo como ellos pero sin ser uno de ellos. Hay que ganarse el respeto con una pinta tras otra de cerveza; lo se, no hago nada extraordinario, siempre acostumbro a beberme tres so cuatro six de kloster y entre cada botella un vasito de jwalker red label con hielos. Ebrios en todos lados hay, pero yo tan insignificante con un gorra de tecate y un jersey del barca que ni imaginan de que nacionalidad soy. No se que puedo parecerles, aunque cuando digo thanx se dan cuenta que lo último que pisé antes de abordar el avión ha sido el tercer mundo; la puta ciudad de México con sus cantinas caras sin buena cerveza, claro, exceptuado el salón Vizacaya y los desparecidos: Orizaba, Kloster y el Nivel. Por lo menos aquí en cualquier calle la cerveza va directa del barril al vaso, con eso me es suficiente.

Vengo a enterrar cualquier opción de seguir escribiendo, aunque sea poco y malo como últimamente. Vengo a tirar al Támesis la última muestra de apego, aunque se que desgraciadamente para mi, no hay nada más que escribir; siempre la misma historia, dando y dando vueltas. No obstante, tengo ganas de escribirle a una puta, ella si sabe lo que quiere… ja, yo solo quería pagarle el cuarto y sus servicios para platicar, por supuesto me rechazó. Esperaba a Sandra a las afueras del metro pino suárez, después de unos 20 minutos una chica me reclamó.
------ Me espantas a los clientes, no puedes hacerte más para allá
------Solo espero a alguien, y aunque miro constantemente tu escote no impido que se acerquen a ti
-------Si, lo se, pero…por qué no mejor vamos al hotel… -----

Sentí una palmada en la espalda y era Sandra, y muy, muy pronto un potencial cliente se acercó a mi puta, fue el peor momento para que una mujer me diera una palmada. Hablamos lo suficiente, me pagó tres de barril y yo le retribuí con un par de libros del Borrachos Fest. Cerca de las 11 pm insistió en tomar un taxi y acercarme a casa, lo único que yo quería era ver de nuevo a esa puta, así que caminé rumbo a casa. Ja… todavía esperé más de 15 minutos para acercarme de nuevo a ella, ¡mierda! Solo potenciales clientes desfilaban y no me dejaban “hacer lo mió”. Por fin estuvo sola unos minutos.
------He regresado, prometo no espantar a tus clientes
------No importa, ya nadie quiere pagar por sexo, lo quieren gratis
-----Bueno, es más fácil ahora toparte con sexo que pagar por un culo
------jajaja… te das cuenta…
------Lo hago, ¿puedo preguntarte algo?
------Dime
------Podemos vernos alguna vez , pero que no involucre tu trabajo, es decir…
------Noooo, conmigo es solo trabajo, no me puedo dar el lujo de aventuritas
------No quiero una aventura, solo beber contigo y hablar
------¡No!
------Cuánto cobras
------200 más 140 del hotel
------Bien, vamos, solo quiero platicar…
-----¡Nooo! Nada de cosas “extrañas”, solo sexo
-----Está bien, no te espanto más a tus clientes, cuídate
------Tu igual, aquí estoy cada sábado, esperando a cualquiera
------Me voy, adiós… ------
Retomé rumbo a casa y me di cuenta que las putas saben lo que quieren. Lamento haberle llamado puta a alguna que otra mujer con la que he salido. Nunca han sabido lo que quieren.

Aquí seguiré en Fulham Road, aislado, dándome cuenta que no soy capaz de ni siquiera hacer que una puta duerma conmigo…