Sunday, February 12, 2006

EL TIEMPO QUE AÑORO Y NUNCA VIVI

Me comporto de la forma más amargada que puedo, me doy cuenta que soy muy mierda con la gente, siempre negativo y les he creado cierta disonancia, no se explican cómo puedo hacer textos tan "buenos" y yo ser un ojete al que todo le parece mal, quizás es un morbo particular por intentar "conocer mi realidad", pero de cierta forma no miento, soy un amargado, no salgo de casa mucho y paso añorando tiempos que nunca viví. Pocas situaciones actualmente me hacen "feliz", una de esas es la nostalgia, hace días compre el "nuevo atari 2600", una réplica de menos tamaño y ya con 40 juegos clásicos programados. Más que tenerlo para "jugar" es un fetish que me recuerda la grata infancia que tuve; ja... hoy me hizo "feliz" cierta coincidencia, la vecina de mi madre tiene una nieta de un año y meses, me quedé "helado" cuando la Señora le dijo, Aisha saluda, la pequeña me observó un poco y después de "pensarlo mucho" se atrevió a darme su manita, y no pude evitar pasar mis dedos por su frente y Aisha aún un poco asustada cerró sus ojos; un día de estos las "coincidencias" me van a matar; minutos después incluso llegué a pensar que había escuchado mal y la pequeña se llamaba "Sasha", pero no... estaba frente a la pequeña "Aisha". No quise preguntar más sobre el por qué del nombre, preferí sentirme mejor durante algunos minutos y después conducir por Neza, ! vaya ¡ ahora hasta mi mecánico está por esos rumbos; varias veces, debido a los nervios y a estar embobado con Ayesha, me pasaba de la salida correcta para llegar a su casa, así que teníamos que ir un poco más allá de la prisión de Santa Marta y tomar el puente para entrar a Neza. Dejé a mi Madre, recogió su auto y antes de que me diera la explicación de como salir a Zaragoza, me adelanté con ------Conozco por acá, se como salir------, solo me respondió -----no seas menso y te vayas a perder, luego no me estés llamando al celular ------. No tenía porque perderme, muchas veces pasé por aquellas calles bajo la dirección de mi " no tan pequeña Ayesha".

Una cerveza, musiquita de marica ---diría un amigo---, y la nostalgia... es lo que si bien no me hace "feliz", me basta para no caer bajo los efectos de la desolación, sigo pensando que estas "coincidencias kármicas" tienen relación con "el tiempo que añoro y que nunca viví".

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